La desocupación golpea más a los jóvenes. En 2009, el 16,9% se vio imposibilitado de encontrar un trabajo, mientras el 34,3% tuvo un empleo precario y el 9,1% un subempleo inestable.
A partir de estas cifras, el Estudio de la UCA considera que hay causas estructurales para la inserción laboral de los jóvenes, especialmente para encontrar un primer empleo.
Entre los mayores de 60 años, prevalece un “efecto desaliento”. Es porque muchos tienen ingresos por la jubilación o pensión y buscan trabajo solo si lo pueden encontrar. Y si no lo consiguen, desalentados, pasan a la inactividad.
Entre los trabajadores con mayores niveles educativos hubo una mayor precarización. Y es porque ante la pérdida de un empleo pleno pueden, por el nivel educativo que tienen, conseguir otro empleo, aunque precario.
Por esa razón, entre las personas que poseen como mínimo la secundaria completa, el empleo pleno se redujo del 58,7 al 49%. En tanto aumentó el empleo precario del 28,5% al 38,1%.
A partir de estas cifras, el Estudio de la UCA considera que hay causas estructurales para la inserción laboral de los jóvenes, especialmente para encontrar un primer empleo.
Entre los mayores de 60 años, prevalece un “efecto desaliento”. Es porque muchos tienen ingresos por la jubilación o pensión y buscan trabajo solo si lo pueden encontrar. Y si no lo consiguen, desalentados, pasan a la inactividad.
Entre los trabajadores con mayores niveles educativos hubo una mayor precarización. Y es porque ante la pérdida de un empleo pleno pueden, por el nivel educativo que tienen, conseguir otro empleo, aunque precario.
Por esa razón, entre las personas que poseen como mínimo la secundaria completa, el empleo pleno se redujo del 58,7 al 49%. En tanto aumentó el empleo precario del 28,5% al 38,1%.
Fuente: http://www.clarin.com/
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